Melodrama sin pegada ambientado en el siempre socorrido mundo del boxeo, más efectista que efectivo y cuyo visionado solo merece la pena por un espléndido —una vez más— Jake Gyllenhaal. Él es el único actor que se salva dentro de un reparto que repite al milímetro todos los clichés del cine de superación personal aSigue leyendo «Southpaw»
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