Nuestra memoria posee la extraña cualidad de idealizar los recuerdos. Es en esta nostalgia, repleta de trampas a nuestro propio pasado, por donde mejor se mueve la aburrida e insustancial Ready Player One. Hiperbólica e innecesaria revisión del cine de Spielberg a cargo del propio Spielberg con algún que otro guiño cinéfilo que certifica —alSigue leyendo «Ready Player One»
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